ni tienes nombre,
mas eres el infinito
al que lanzo la palabra.
La luz inconsistente
que marca el ritmo
en la oscuridad de mis letras.
El dedo invisible
que oculto tras el papel
hurga inconsciente en la herida.
La mirada extraña
que verso a verso
me recorre las entrañas.
Un infinito con ojos y oídos que no queda indiferente. Imposible hacerlo.
ResponderEliminarBesos, Magda.
Un infinito del que alimentarse... gracias acróbata. Besos.
EliminarTan enigmática siempre Magda....
ResponderEliminarGracias por compartir.
Beso
¿Lo soy? Qué cosas...
EliminarGracias a ti siempre, Oscar.
Besos.
¿Te cuento un secreto?
ResponderEliminarTengo una silla , en el camino antes del infinito , y allí aguardo que la venda se derrame y la penumbra te deje escribir un nuevo poema.
Un abrazo.
Secreto que guardaré con mimo... es bello poner algún nombre a ese infinito desconocido.
EliminarGracias Jaime, abrazos.
Estrofa para lo innombrable... Pero, algunas veces, cobra cuerpo, se concreta y te deja marcado para siempre.
ResponderEliminarPequeño gran poema.
Poema... tan solo una pequeña confidencia que quise compartir.
EliminarMil gracias Rafael, un abrazo.
Pequeño pero fuerte!
ResponderEliminarEnhorabuena!
Te invito a mi blog!
Muchas gracias Artista Sem Pena!
EliminarPasaré a visitarte...
beautiful blog kisses albert
ResponderEliminarThanks so much Albert!
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