el aire huele
a humedad sin llanto,
sabe a sudor
sin tacto, sin piel,
sin compañía.
Hoy
la noche se cubrió de escarcha:
descendió
desde el cuello a la rodilla,
dio la vuelta a medio camino
e hizo suyas mis entrañas.
Hay en el aire...
Hoy
el aire huele
a humedad sin llanto,
sabe a sudor
sin tacto, sin piel,
sin compañía.
Hoy
la noche se cubrió de escarcha:
descendió
desde el cuello a la rodilla,
dio la vuelta a medio camino
e hizo suyas mis entrañas.
el aire huele
a humedad sin llanto,
sabe a sudor
sin tacto, sin piel,
sin compañía.
Hoy
la noche se cubrió de escarcha:
descendió
desde el cuello a la rodilla,
dio la vuelta a medio camino
e hizo suyas mis entrañas.
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No se necesitan muchos versos para expresar un estado de ánimo a la perfección, siempre me dan un pellizquito en el alma tus letras Magda y siempre hay una belleza extraña en la tristeza.
ResponderEliminarUn beso muy grande, es siempre un placer venir por aquí
Ana
Muy bonitas tus letras,
ResponderEliminarun placer leerte.
te dejo un saludo.
Querida Ana, ojalá no desaparezca nunca esa sensación... y así te tenga siempre en esta penumbra. Un beso enorme.
ResponderEliminarRicardo, bienvenido eres, y gracias por dejar huella. Un placer tenerte en este mi rincón. Saludos.
ResponderEliminarAlquimia deslumbrante que transforma el dolor en belleza, la penumbra en luz.
ResponderEliminarSuerte la mia de tener siempre presente en esta alquimia a mi apreciado Guía...Gracias.
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